martes, 12 de julio de 2011

El rollo snob independiente

Llevo días pensando que la escena indi madrileña y la escena indi nacional en general, es un nido de víboras snobs tan absurdas que aburren a los muertos. Me encantaría saber lo que piensa esta gente realmente de todo esto. Casi puedo imaginármelo, porque uno también ha hecho sus pinitos en dicha materia. Seguramente, empezar a desvelar sus verdaderos gustos y opiniones, daría pie a una nueva vertiente de esnobismo ilustrado de lo más interesante.

Blog

Pobre blog.Escribo en él de pascuas a ramos. Pero soy así, me lo guardo todo, me aburro de minuto a minuto, y sin embargo soy un puto vago para empezar a hacer algo y terminarlo del todo. Siempre ha sido así, pero cada vez más. Estos meses han sido de cambios, cambios muy importantes en mi vida, pero no puedo más que sentir que que me acomodo y me estanco, que no pasa nada en mi vida. Quizás esté equivocado y esta no sea la dirección correcta, o quizás me esté aburguesando demasiado. Creo que voy a ser un inmaduro toda mi vida, no me interesan nada las cosas que le interesan a toda la gente que me rodea, y no sé si es un problema o una virtud . Estoy demasiado acostumbrado a vivir desde mi perspectiva, a no compartir mis pensamientos, y es donde realmente me siento a gusto. También podría llamarse cobardía, pasividad...y puede que sea hora de aceptarlo. Aunque estoy empezando a sospechar que es más fácil de la otra manera, y que soy tan sociópata que no me doy cuenta que es más fácil vivir en grupo y conseguir las cosas simplemente relacionándome con los demás. A veces me siento como que estoy ahí, en medio de un universo, y que es suficiente, como una semilla; el resto son el agua o los cultivadores que recogen el fruto de la planta, los que trabajan por mi pero de mí, los que lo hacen posible sin que yo tenga que moverme. Y eso puede que sea extraño, egoísta o una gilipollez, pero es el papel al que me he acostumbrado. Sé lo que quiero hacer pero no sé cómo, y eso es a veces frustrante y otras bonito, porque hace de otros mis brazos. Como dice la canción de Astrud : 'Créeme si te digo que no es culpa mía,
que más bien se trata de una minusvalía'.

También es posible que nada de lo que acabo de escribir tenga ninguna coherencia. Pero escribir me ayuda a ordenar mis ideas, y hacía meses que lo único que hacía era darle vueltas a la cabeza.

martes, 4 de enero de 2011

'EL MAPA' de FAMILY

El pasado mes de octubre grabamos para LA 2 de TVE nuestro primer concierto en 'Los conciertos de Radio 3'. A parte de otras siete canciones de 'Planes de verano' y 'Galimatías', nos propusieron interpretar un cover de algún tema clásico. Aunque preparamos una versión mucho más elaborada de 'Detrás de la mirada' de Décima víctima, casi en último momento decidimos decantarnos por una de las canciones más bonitas de ese único y mítico álbum llamado 'Un soplo en el corazón' de Family. Es una versión acústica y minimalista que ya teníamos grabada, y que en esta ocasión contó con el violín eléctrico de la gran Pili Crespo, habitual de Klaus&Kinski y Los Autócratas. Espero que os guste.

lunes, 3 de enero de 2011

LA IGNORANCIA

Existen, al menos, dos vertientes de la ignorancia. La que se basa en el miedo y la estupidez , y aquella sobre la más extrema curiosidad y las ganas de saber, y por tanto, transformadora de las personas en criaturas más completas y maravillosas.

lunes, 27 de diciembre de 2010

COCODRILO

Os adelanto dos fotogramas del video de 'Cocodrilo'. Realizado por los alumnos de tercero de audiovisuales de la escuela EDIB-IFES de Palma De Mallorca.
Pronto más información.




domingo, 26 de diciembre de 2010

VOY A INTENTARLO

Bueno.Pues aquí estoy otra vez. Voy a intentarlo. Voy a volver a subirme a la escalera. Como antes. Llevo mucho tiempo perdido, pero es que no me había parado a reconocerlo. Una de las personas más importantes de mi vida tuvo que decírmelo para que yo empezara a reaccionar. A veces si te lo tragas todo, nada ocurre, ni existe...y yo necesitaba por una vez en mi vida aterrizar, posarme un momento sobre la tierra, hacer algo que no fuera esperar, pensar y desear.Hacer algo físico y directo con la materia que me rodea, para eso sí, después, seguir imaginando. Igual que antes, cuando podía llegar a ser feliz. Admiro al mundo y sobretodo a las personas. Pero quiero, por fin, dejar de tenerles tanto miedo. Quiero que igual que yo los comprendo, también ellos me comprendan a mi. Y para eso, solo hay una fórmula: empezar a comprenderme a mi mismo.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Una historia de fantasmas

Era muy tarde, no sabía qué hora exactamente. Había querido mirar el reloj hacía unos segundos pero me había perdido,como siempre,en las ideas que afortunadamente, o no, atraviesan mi mente en cada momento de mi vida a la velocidad del sonido. Eran las dos y dos exactamente, aunque yo eso no lo sabía,claro. Creo que abrí la puerta del salón donde me encontraba y entré en la cocina para buscar algo indefinido(ya me había perdido otra vez); fúe un trago de agua. Volví al salón y apagué la tele después de haber buscado el mando a distancia entre los cojines azules de mi sofá. Aquel silencio de madrugada aún joven, casi bebé, se deslizó contundente dentro de mí, desde la boca hasta que vi el pasillo con la luz apagada, y al final la puerta del dormitorio. Pulsé el interruptor y avancé descalzo cuidadosamente, mimando la calma, sintiendo quieto el suelo de madera que me sostenía, temiendo, de repente, pero sabiendo a la vez que no ocurriría, perder el equilibrio de mis piernas e instantáneamente el de aquella atmósfera compacta. Entré en mi cuarto; solo yo y solo él. La cama mal hecha por mi; la encimera llena de cosas guardadas para nada, simplemente por si acaso, siempre por si acaso. Así que te imaginé allí, dormido de espaldas, guardándome un sitio inconscientemente. Y entonces quise aún ser más silencioso, para no despertarte, más, más quieto, más pesado, más sutil, casi sordo, mudo del todo. Cerré la puerta con cerrojo, muy despacio, por no ponérselo fácil a los monstruos, asesinos y ladrones que ocupan siempre casas tan vacías como la mía. Y me acerqué. La alfombra me daba seguridad. Creo que estuve un rato allí plantado, creyéndome cosas, tratando de descifrar quién eras tú. Oí tu brisa o respiración quebrantando suave el aire y el polvo muerto que solo dice cosas muy temprano, desayunando con la luz de la mañana. Tragué de repente otro mar y me di cuenta de que sonreía, casi llorando. Y entonces aparté la colcha que te cubría, me metí dentro de aquel lecho perfecto para morirse. Permanecí aún un rato reclinado, con el cielo profundo dentro del pecho. Nos arropé, pasé mi brazo por el tuyo que me ignoraba. Te despertaste un poco; no sabías; pero al final, rápidamente reconociste que era yo, y me agarraste la mano. Respiraste muy hondo, tan hondo como se hundió el barco en el que te hiciste fantasma, allí, de aquel modo y ya está. Seguiste durmiendo, y yo, apagué la luz.